Sandy Arboleda


 

Reciban un fraterno agradecimiento cada uno de ustedes por haberme abierto las puertas de Capacitaciones "El Oro". Agradezco a Dios a mis hermanos por haberme ayudado con un granito de arena a mis amigos por sus palabras de aliento.

Una pequeña historia de mi vida desde mi niñez he sufrido a través de mi sonrisa habían lágrimas aún más con las pérdidas de mis padres cuánto quisiera que ellos estuvieran vivos para verlos sentados entre esta sillas siento un agradecimiento conmigo mismo siempre me he caracterizado como una persona responsable honesta sincera y con un gran corazón todo en la vida cuesta un sacrificio para estar en este lugar me ha costado he llorado he reído en ciertas ocasiones llegué a aguantar hambre y siempre fui con una sonrisa a estudiar aunque mi estómago estuviera vacío hay un dicho que dice si ya estás en el barco subido quédate hasta el final con Dios todo es posible.

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